K-drama asesino en serie de Netflix tiene un encanto extraño




 Sum tiene dificultad para relacionarse con las personas que la rodean, pero lo que sí entiende son las máquinas.

 Esta habilidad técnica, combinada con su confusión sobre el comportamiento social, la impulsa a crear "Alguien", un chatbot de IA que nivela el campo de juego social al permitir que se escuchen los deseos de las personalidades tímidas.

 Alguien: K-drama asesino en serie de Netflix tiene un encanto extraño

 Sum es buscada por la start-up Spectrum, donde, como su CTO (directora técnica), construye el chatbot en la aplicación Tinder-esque Somebody.

 Yun-o es un joven alto e intenso que comienza a usar a Alguien. Es un sociópata que atrae a personas solitarias a través de la aplicación, a muchas de las cuales mata, pero no a todas. Esto hace que Spectrum atraiga la atención negativa de la policía. La empresa no compartirá información privada, pero comienza una investigación interna.

 Sum pronto comienza a conversar con Yun-o y, a pesar del aparente peligro de hacerlo, lo conoce en persona. Sum se siente atraída por él y cuanto más tiempo pasan juntos, más siente que finalmente ha encontrado a alguien que la comprende

 Kang Hae-lim (izquierda) como Sum y Kim Young-kwang como Yun-o en un fotograma de Somebody.

 Yun-o también reconoce algo en Sum, y cuidadosamente saca a relucir su apetito latente por la violencia. Esto comienza con una escena insoportable que involucra a un gato moribundo que sale de su miseria que puede servir como prueba de fuego para muchos espectadores.

 Ciertamente no es la última vez que se pondrá a prueba nuestra tolerancia a la crueldad.

 A medida que se desarrolla su relación inusual, Alguien se burla de un movimiento hacia el territorio de los amantes asesinos en fuga: piense en películas memorables desde Bonnie y Clyde y Badlands hasta Bones and All de este año.

 También en la imagen están la amiga de Sum, Yeong Gi-eun (Kim Soo-yeon), una oficial de policía que usa una silla de ruedas después de quedar paralizada en un accidente, y la amiga de Gi-eun, Im Mok-won (Kim Yong-ji), una lesbiana. chamán.

 Kim Soo-yeon (izquierda) como Gi-eun y Kim Young-kwang como Yun-o en un fotograma de Somebody.

 Gi-eun se convierte en una de las víctimas de Yun-o cuando él la atrae a una piscina abandonada, se acuesta con ella y luego la deja allí sin silla de ruedas, obligándola a arrastrarse de regreso a la civilización en medio de la noche.

 Después de este traumático incidente, Gi-eun está decidida a vengarse, pero su vergüenza la obliga a hacerlo sola. En lugar de contarles a sus colegas lo que sucedió, solicita la ayuda de Mok-won y, en menor grado, de Sum, quien se debate entre el amor y la lealtad.

 El resto del espectáculo se compone en gran parte de sexo y personajes que se ponen en peligro, dos actos que en el mundo de Alguien suelen ser sinónimos.

 Los temas de alienación y marginación resuenan alto y claro, pero el paquete en el que se entregan será desagradable para muchos espectadores.

 La colección de personajes neurodivergentes, discapacitados y homosexuales se siente simbólica y el punto de vista lascivo del programa solo empeora las cosas. Hay mucho sexo en Alguien, mucho más de lo necesario para transmitir su punto de vista.

 Todas las mujeres en la historia existen en un abismo de soledad, y el uso de sexo arriesgado por parte de alguien representa los extremos desesperados a los que llegarán para llenarlo. Pero el sexo es la única forma que tiene el programa de describir ese anhelo de conexión; después de un tiempo todo comienza a sentirse un poco pervertido.

 Todos los personajes están impulsados ​​por deseos e impulsos profundamente arraigados, pero esto a menudo conduce a un comportamiento confuso y, en ocasiones, difícil de aceptar.

 Kim Soo-yeon (izquierda) como Gi-eun y Kim Yong-ji como Mok-won en un fotograma de Somebody.

 Sum se pone en gran peligro con Yun-o, lo que podemos aceptar ya que, en un nivel profundo, estos dos personajes pueden entenderse y confiar el uno en el otro. No es así con Gi-eun, quien repetidamente se involucra en un comportamiento imprudente.

 En un momento, se encuentra con Yun-o nuevamente en un laberinto de callejones delgados, ya que están siendo demolidos, sin que nadie sepa dónde está y sin forma de defenderse.

 Si este comportamiento desconcertante se limitara a los personajes principales, podría haber dado lugar a cierta contemplación de nuestra parte: ¿qué impulsa a estos personajes a comportarse de esta manera?

 Pero, lamentablemente, incluso los personajes secundarios no actúan dentro de los límites de la razón. Entre ellos hay trabajadores que no obligan a una mujer en silla de ruedas a salir de un área de demolición y policías ajenos a la

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